miércoles, 27 de agosto de 2008

Hablar, hablar y hablar

Esto se va acabando. Me refiero a mis vacaciones. Lo cierto es que han sido muy tranquilas pero lo hemos pasado estupendamente. Nos hemos quedado en casita por primera vez en muchos años y lo que empezaba con desazón ha acabado maravilla. No hay nada como resignarse e ir buscando lo bueno y las oportunidades en los pequeños inconvenientes.

Pues bien, el habernos quedado en casita nos ha permitido descansar mucho más que en la playa y nos ha permitido conocer sitios que tenemos muy cerca pero a los que nunca vas precisamente por eso, porque están aquí al lado y siempre puedes ir. Pero además hemos cumplido el objetivo con el que comenzabamos estas vacaciones: estar mucho tiempo juntos los cuatro, disfrutar juntos y hablar, hablar y hablar de nuestras cosillas.

Os lo recomiendo a todos: hablar muchísimo con vuestra mujer/marido e hijos. Es el único camino para que la llama, el cariño, la relación vaya por buen camino. Yo cada vez que oigo que se rompe una pareja pienso: "seguro que no hablaban mucho". Hablar quiere decir eso, hablar. Hablar de lo mas nimio a los más trascendente, desde los filetes empanados hasta nuestros sentimientos más intimos, desde los biberones hasta nuestras creencias. Si no hablas estás perdido, amigo.

Habla, habla, habla y habla con tu familia todo lo que puedas: mejor pasarse que no llegar. Te lo recomiendo. Y el verano es una buena oportunidad para ello. ¿ las ha aprovechado?. Si lo has hecho enhorabuena y si no lo has hecho, no te preocupes el otoño también es buen momento para recomenzar. Adelante¡¡¡¡

8 comentarios:

Terly (Juan José Romero Montesino-Espartero) dijo...

Si te apetece, en mi blog tengo premios "a elegir", si alguno es de tu agrado, como en los autoservicios, sírvete tú mismo y gracias anticipadas por tu visita.
Un abrazo.
Te visitaré con más calma después de mi reparto de premios

Luis y Mª Jesús dijo...

Totalmente de acuerdo, pero permíteme que añada que a veces hay que buscar el momento oportuno. Por ejemplo, esta semana está siendo particularmente dura y procuro medir las palabras porque Luis está con una de sus piedras en el riñón, por desgracia habituales, y todo lo interpreta mal. Es lógico que la tensión se canalice hacia aquellas personas con las que se tiene más confianza pero... yo tengo demasiado genio. En fin, esto es peor que las hormonas, pero creo que ya estamos al final de este episodio.
Respondiendo a tu comentario de hace dos días, me encantaría que me ganaras, pero, quien sabe, pueda que ya me hayas ganado con dos, porque esto de los niños no es cuestión de número
Un abrazo
María Jesús

Aguijón dijo...

Te voy a dar un consejo aunque no me lo pidas, perdón.
Es que el día que tengas que cambiar de coche, pongas un dvd. Si no, también los hay portátiles.
Los niños van tranquilos (nosotros sólo lo usamos para viajes largos) y mi mujer y yo podemos hablar tranquilamente... una gozada...
un abrazo,

familia sin apuros dijo...

Querido Terly, ahora mismo paso por ahí.
Maria Jesús, claro que hay que buscar el momento adecuado pero creo que se debe hablar de todo. NO perdamos ninguna oportunidad para hacerlo. Esa es la idea. Si no se habla el matrimonio está perdido.
Aguijon, muchas gracias por el consejo. Siempre viene bien que la gente de ideas y si estas son con cariño mucho más. Por cierto, lo haré

Anaroski dijo...

La comunicación es lo más importante en una familia, en una pareja, con los hijos, con los amigos, con los padres, la mayoría de los problemas de nuestra actual sociedad se reducen en falta de comunicación y por consiguiente en falta de ponernos en el lugar del de al lado.

Terly (Juan José Romero Montesino-Espartero) dijo...

Me gusta mucho tu consejo y de hecho lo practico cuanto puedo, pero...permiteme que te dé otro.
Escucha, escucha, escucha...tan importante como hablar si no más es escuchar a los demás, empezando por tu mujer y tus hijos pero también o continuando con el vecino, los amigos, los profesores, etc. con todo aquel que pueda aportarte algo. Escuchar también es muy importante. Mi pecado o mi virtud ¿quién lo sabe? es que quizás escuche más de lo que hablo, pero la verdad es que me gusta mucho escuchar.
Un abrazo y de nuevo gracias por tu consejo.

Hilda dijo...

yo soy experta en el hablar, hablo hasta por los codos, ji ji, no, ya en serio, creo que tienes toda la razón, la comunicación es vital en toda familia, si no se habla a tiempo y se va dejando las cosas se hacen rencores, resentimientos y se provoca el dolor.
Eso sí para hablar, en el momento adecuado, y con prudencia.
saludos. Hilda

familia sin apuros dijo...

Ojala así sea Luisa, de momento hacemos lo que podemos para que sea para toda la vida.